ANTES/DESPUÉS: EL NUEVO ESTUDIO DE DECOR&ME

Hoy por fin puedo enseñaros el nuevo estudio desde el que trabajo todos los días. Yo trabajaba desde casa, pero cuando me quedé embarazada me tuve que "mudar" a casa de mis padres para dejar libre el dormitorio en el que trabajaba y que sería el cuarto de Luna, así además ellos se podrían quedar con la peque cuando yo estuviese trabajando arriba en el estudio.

En Septiembre del año pasado decidí cambiarme de habitación a una mucho más luminosa, el cambio ha sido lento porque no podía dedicar mucho tiempo y excepto la colocación del aire acondicionado, lo hice todo yo (con la ayuda de mi padre tengo que aclarar).

Como siempre, en Leroy Merlin estuvieron encantados de ayudarme, así que me dirigí a uno de sus centros y me dispuse a realizar mi lista de la compra, tenía muy claro que quería dar un aire nórdico y cálido al estudio, así que me decanté por la mezcla blanco-madera natural, así como tonos pastel para las paredes. Os dejo con el resultado!

Este es el ANTES de la habitación, tonos beige en las paredes y estanterías de color oscuro, así que lo primero que hicimos fue pintar las paredes.

Para las paredes elegimos dos tonos diferentes, por una parte el tono Nimbus Cloud de Pantone y un verde mint que me hicieron a medida en la tienda.

Además necesitaba un aparato de aire acondicionado frío/calor para mantener una buena temperatura en la habitación, nos decantamos por un Daikin que va genial!

Necesitaba mucho espacio de almacenaje, así que elegí dos tipos de estanterías distintas, por una parte dos módulos de librería en color blanco, en la que almacenaría los muchos catálogos que tengo en el estudio para tenerlos siempre a la mano y un módulo de estantes para las revistas de decoración que me sirven de inspiración y los libros y manuales de decoración.

Para dar un toque de calidez a tanto blanco y "esconder" los objetos que no quiero que estén a la vista, completé la decoración con una serie de cubos, cajonera y cajas de madera de pino natural que me encantó y que recomiendo 100%.

En cuanto a la mesa, no quería la típica mesa de estudio, tenía que ser bastante grande, así que al ver estos caballetes de madera natural (que a la vez tienen espacio de almacenaje) tuve claro que eran perfectos, para completarlos elegí el sobre de vidrio, así aligeraría visualmente el espacio. Ya sólo quedaban los detalles, un corcho que compré en rollo y corté a la medida que necesitaba que me serviría como memorándum y panel de inspiración, una lámpara de estilo industrial, un sencillo estor y el primer dibujo que hizo Luna enmarcado y que preside mi espacio de trabajo fueron los elementos finales para dar por terminado el estudio. Ahora sí os dejo con el resultado final, espero que os guste!