Este proyecto fue para mí todo un reto, pues en 32 m2 de superficie tenía que ubicar a dos adultos y dos niños, cocina, comedor, salón y baño.
En este caso el proyecto se realizó mediante un ASESORAMIENTO PERSONALIZADO, pues el apartamento se encuentra en la provincia de Sevilla y los clientes creyeron que esta era la opción que mejor se adaptaba a sus necesidades.
En primer lugar tuvimos una entrevista personal para conocernos mejor y saber cuáles eran los gustos y necesidades de ellos, se realizó la medición del apartamento y se comenzó con el proyecto, en el que tuvimos algunas reuniones más para mostrar las elecciones que se iban realizando.
Al tratarse de una segunda vivienda no querían invertir demasiado en mobiliario y tenían que ubicar una cama adicional en la que pudieran dormir dos niños pequeños.
Para resolverlo se eligió mobiliario de tiendas de la zona con piezas de IKEA: como las lámparas, los textiles, el comedor,...y se colocó un sofá cama en el salón para que los niños pudieran dormir allí, pues el apartamento cuenta con un sólo dormitorio.
Los clientes querían cambiar el suelo existente (una solería de terrazo) por un parquet o similar, siempre buscando algo que fuera económico, para lo que se eligió un suelo laminado en color haya.
DISTRIBUCIÓN
SALÓN
Las paredes se pintaron en blanco (pues el tamaño es reducido y, aunque la ventana es bastante grande, da a una calle estrecha) para lograr la mayor luminosidad posible, excepto la pared del sofá que se empapeló a rayas verdes y beige. En cuanto al mobiliario se colocó un mueble modular, pues necesitaban espacio para guardar, combinado en blanco y chocolate, así como una mesa de centro, también blanca, con tapa de cristal. Las zonas de asiento se solucionaron con un sofá cama en beige, un sillón y un puff con espacio de almacenaje extra. El resto de la estancia se decoró en tonos verdes.
COCINA
En lo referente a la cocina, se buscó en color blanco, con encimera color chocolate y muebles colgados en la pared buscando bastante espacio para guardar.
Nos quedaba poco espacio para ubicar el comedor, así que encontré la solución perfecta con la mesa FUSION de IKEA, ya que al esconder las sillas queda una mesa que ocupa tan sólo 90 cm (ideal para espacios pequeños).
DORMITORIO
La clienta quería un dormitorio con aires románticos, para lo que pintamos las paredes en gris perla, excepto la del cabecero que se pintó en un gris más oscuro. El mobiliario se escogió en un blanco envejecido, como cabecero uno sencillo de forja en blanco, una cómoda con el espejo UNG DRILL de IKEA y para la ventana se eligieron paneles japoneses en gris y blanco roto.
Y hasta aquí este proyecto, que supuso un gran reto, pero en el que los clientes quedaron muy contentos con el resultado.
Y a vosotros ¿qué os ha parecido?
P.D.: En cuanto los clientes me pasen las fotos con el resultado final os las enseñaré.
FELIZ JUEVES!!
:)
Soy María Rodríguez, diseñadora de interiores y amante de mi profesión, déjame que me ocupe de todo, adaptándome a tus necesidades, haré de tu sueño una realidad.
6 comentarios
No me queda claro por donde se entra al apartamento. ¿Podrías aclararlo?
ResponderEliminarPara Anónimo: Ya está modificado el tema de la puerta de entrada, el programa de diseño había "escondido" la puerta, tiene la entrada por el salón. Gracias por darte cuenta y gracias por leerme, espero que te haya gustado el proyecto. Un saludo.
ResponderEliminarMaría.. perfecto el resultado.. sobretodo no se nota para nada q son sólo 32 metros cuadrados, y pienso que ese es el gran mérito!!!! Felicidades!! Sigue así Crack!!!! saludos!!
ResponderEliminarPara Javier Jurado: Muchísmas gracias, me alegro que te guste!
ResponderEliminarEl resultado es increíble. En tan pocos metros cuadrados parecía imposible meter tanto y tan desahogadamente. Te felicito, sigue adelante que estas en buen camino.
ResponderEliminarLove the end result - functional and pretty! Just found your blog and want to say how inspiring it is :)
ResponderEliminarand I'm curious...what softver you use for 3D visualisation, they're AMAZING
take care, Millie